Para esto, todas las semanas junto a técnicos de las áreas de Bromatología y de Seguridad e Higiene realizan inspecciones de los establecimientos con el objetivo que estén en condiciones de funcionamiento: antes, durante y después de ocurrido el evento; así toda aquella persona que concurra a los mismos, se sienta seguro de permanecer en dicho lugar.

Antes del evento que la actividad comercial brinde, se observan las condiciones necesarias de salubridad, seguridad e higiene: matafuegos, disyuntor diferencial, luz de emergencia, salida de emergencia, personal de seguridad contratado, provisión de agua en baños, condiciones edilicias higiénico sanitarias acorde a este rubro, entre otras.

Durante el evento se concurre a verificar que las mismas continúan desarrollándose con normalidad acorde a los ítems antes mencionados, como así también la emisión de sonido que este dentro del rango preestablecido por la ordenanza 8832/1989 de “ruidos molestos”.

Y por último, al finalizar, nuevamente se concurre en las primeras horas de la mañana, evitando que ocurran desmanes y consuno de bebidas alcohólicas en la vía pública, tal como lo establece la ordenanza 10514/2001 Art. 8 de “prohibición de consumo de bebidas alcohólicas en la vía pública”. De esta forma se garantiza, que aquellas personas transeúntes de las primeras horas de la mañana, puedan también disfrutar de un paseo matinal en las zonas de paseos públicos.